marzo 30, 2023

EL Café Mejora la Memoria y Protege el Cerebro




El café es una de las bebidas más consumidas en el mundo. No hay nada como iniciar el día con una buena taza de café para reponer energías y mejorar el sentido de alerta.

Tomar un café es algo que muchos hacemos varias veces al día. Para hacer una pausa y recobrar fuerzas, un momento de tertulia con amigos o en familia. El café es una constante en nuestra sociedad y su éxito tiene que ver con sus efectos sobre el sistema nervioso, pero su consumo también tiene sus riesgos.

Sus orígenes son africanos, pero su consumo se extendió por todo el mundo.

En Occidente se hace popular en el Siglo de las Luces y, pronto, alrededor del café surgen establecimientos especializados. Cafés literarios, políticos, cafés cantantes con orquestas. En el café el parroquiano encuentra la prensa diaria, las revistas, los libros, pero también juegos de mesa, lecturas de poesía o conciertos, que generan conversaciones y tertulias.

El café y lo que lo rodea despierta adoración o rechazo. Su consumo se considera medicinal o peligroso, exótico o vulgar. Lo cierto es que siempre está rodeado de polémica.

Lo bueno del café

Lo primero es sin duda que despeja. Para unos la energía imprescindible para empezar el día, para otros, la causa de sus insomnios. No sólo porque lo notamos al tomarlo, sino porque varios estudios muestran cómo el café actúa sobre la corteza prefrontal del cerebro y, así, mejora la memoria a corto plazo y acelera los tiempos de reacción.


En concreto el café activa la dopamina y actúa sobre la circunvolución del cíngulo anterior, lo que mejora la memoria ejecutiva, la atención y concentración, la planificación y seguimiento de tareas.

La cafeína también disminuye el sueño porque bloquea la acción de la adenosina. Un neuromodulador que actúa en los vasos sanguíneos y los bronquios y a nivel del sistema nervioso central tiene efectos sedantes e inhibitorios.


Lo malo del café

La adenosina actúa en los vasos sanguíneos dilatándolos, cuando tomamos café bloqueamos su acción por lo que las arterias se contraen y, si se consume en altas cantidades, aumenta la tensión arterial.

Aumenta el ácido del estómago y puede favorecer los síntomas de ardor y reducir el apetito.

Como la cafeína tarda entre cinco y seis horas en ser eliminada del organismo, si se toma por la tarde es muy probable que cause insomnio.

Además, el café es adictivo y causa tolerancia – cada vez se necesita más cantidad para tener el mismo efecto –.

La diferencia en el flujo sanguíneo cerebral después del consumo de cafeína es más significativa entre los consumidores ocasionales que entre los asiduos al café.

¿Cuánto café y cuándo?



Parece ser que es seguro que un adulto tome hasta 400mg de café al día. Si se pasa esa cantidad al dejar de tomarlo aparecen esos efectos tan desagradables: fatiga, dolor de cabeza y distracciones.

Las mejores horas para tomar café son cuando el cortisol – una hormona que activa nuestro cuerpo– empieza a descender y queremos mantener una actividad alta.

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Durante años, se habló de las consecuencias negativas de tomar café: irritación, ansiedad, problemas para conciliar el sueño… Pero durante los últimos años, científicos han hablado de sus beneficios.

Esta bebida ha sido fruto de numerosas investigaciones. Desde los componentes del café hasta cómo afecta a nuestra salud, todo ha sido analizado por expertos.

Diversas investigaciones han encontrado que está muy relacionado con la mejora de la memoria y la prevención del deterioro del cerebro.

De acuerdo con algunos estudios realizados en la universidad de Harvard, su ingesta puede retrasar el deterioro del proceso cognitivo.


Consumir café o té durante la mediana edad puede disminuir el riesgo de sufrir demencia o Alzheimer

Investigadores de la Universidad de Kuopio y del Instituto Nacional de Salud Pública (Finlandia) y del Instituto Karolinska (Suecia) en un estudio, publicado en la revista Journal of Alzheimer's Disease de febrero 2009, han descubierto que consumir café o té durante la mediana edad puede disminuir el riesgo de sufrir demencia o Alzheimer en una etapa posterior de la vida.

Como es bien sabido, la cafeína estimula el sistema nervioso central de forma inmediata, pero no se sabía a ciencia cierta de qué forma afecta a la cognición a largo plazo. La investigación llevada a cabo por el equipo de investigadores ha aportado varias respuestas de interés a esta incógnita.

El equipo del estudio CAIDE (“Factores de riesgo cardiovascular, envejecimiento y demencia”) seleccionó a participantes todavía vivos que anteriormente habían sido evaluados en una investigación de población llevada a cabo por el proyecto North Karelia y el estudio FINMONICA en los años 1972, 1977, 1982 o 1987. Cerca del 71% (1.409 participantes) de las personas evaluadas en estos estudios se volvieron a someter a examen en 1998.

El equipo descubrió que 61 participantes padecían demencia y 48 sufrían Alzheimer. Se propusieron estudiar la relación entre el consumo de café y té durante la mediana edad y el riesgo de padecer demencia o Alzheimer en una etapa posterior en la vida, porque todavía no se conocía el efecto a largo plazo de la cafeína en el sistema nervioso central. Además, los procesos patológicos que conducen al Alzheimer pueden comenzar décadas antes de la manifestación clínica de la enfermedad.

De acuerdo con el equipo de investigación, el examen durante la mediana edad empleado en el estudio sirvió para evaluar el consumo de café y té mediante un cuestionario semi-cuantitativo de frecuencia de consumo de alimentos que había sido validado con anterioridad. Clasificaron el consumo de café en tres grupos: bajo – cuando se tomaban entre ninguna y dos tazas –, moderado – entre tres y cinco tazas – y elevado – cinco tazas o más –. En relación al consumo de té, los investigadores clasificaron a los participantes en dos grupos: no consumidores si no tomaban ninguna taza al día y consumidores cuando tomaban una taza al día.

Los investigadores descubrieron que los bebedores de café de mediana edad tienen menor riesgo de sufrir demencia o Alzheimer durante la vejez que los que no bebían o bebían muy poco café. Los datos también mostraron que el riesgo de los consumidores moderados de café era el menor (65%). El equipo también descubrió que la mayoría de los participantes bebía té más bien de manera excepcional, por lo que no se observó ninguna relación entre el té y la demencia o el Alzheimer.

Según los investigadores dada la gran cantidad de café consumido en todo el mundo, los resultados pueden tener importantes implicaciones para la prevención o el retraso de la manifestación del Alzheimer o la demencia. Este descubrimiento debería confirmarse mediante otros estudios, pero abre la puerta a reducir el riesgo de padecer Alzheimer o demencia mediante intervenciones dietéticas. Además, la identificación de los mecanismos por los que el café protege contra la demencia o el Alzheimer puede ayudar a desarrollar nuevas terapias para estas enfermedades.


El café regula nuestro reloj biológico

Investigadores de la Universidad de Colorado-Boulder (EE.UU.) y del Laboratorio de Biología Molecular del Medical Research Council de Cambridge (Inglaterra) mostraron por primera vez, en un estudio publicado en la revista Science Translational Medicine de setiembre 2015, cómo la cafeína afecta directamente el reloj biológico al demorar el aumento en el nivel de la melatonina.

Durante la investigación trabajaron durante 49 días con diversos voluntarios a los que de forma totalmente controlada recibieron a diario y tres horas antes de acostarse, o una dosis de cafeína equivalente a un expreso doble, o una exposición a la luz fuerte o débil, o un placebo.

A todos ellos se les tomaron muestras de saliva para medir los niveles de melatonina, la hormona que se acumula en el cuerpo en las horas de la oscuridad e indica que es el momento de dormir, demostrándose que los voluntarios que habían recibido las píldoras de cafeína en condiciones de poca luz retrasaban el auge de la melatonina nocturna en aproximadamente 40 minutos. Este tiempo aumenta significativamente si se combina la ingesta de cafeína con una exposición a luz brillante, retrasando en este caso el reloj biológico hasta unos 105 minutos aproximadamente.

Este alcaloide del grupo de las xantinas se une a los receptores neuronales de adenosina, provocando la transmisión de neurotransmisores excitadores y alterando la señalización intracelular cíclica de monofosfato de adenosina y el metabolismo celular en una amplia gama de células y tejidos.

Todo ello modifica el ritmo del sistema circadiano, el regulador clave del tiempo diario de sueño-vigilia, así como de otros procesos fisiológicos y conductuales.

Esa sustancia puede bloquear los receptores de adenosina que, en condiciones normales, tienen efectos sedantes y favorecen el sueño.



Los investigadores creen que el uso de cafeína adecuadamente programado puede ayudar, por ejemplo, a la adaptación circadiana a los grandes retrasos de fase a los que es sometido nuestro cuerpo cuando se vuela a través de muchas zonas horarias o bien, también, puede resultar muy útil para determinar la vigilia hasta la hora de acostarse en la nueva zona horaria o para trabajar en el tratamiento de pacientes con trastornos del sueño circadiano, en los que su reloj interno de 24 horas no funciona correctamente.

El café además de mantenernos despiertos y en alerta puede contribuir a compensar los desajustes de nuestro reloj biológico, contribuyendo a minimizar las alteraciones prolongadas en los ritmos circadianos provocadas por trabajos en diferentes turnos o desfases horarios varios y que son la causa del incremento del riesgo de varias enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2 y enfermedades neuro-degenerativas.


Beber café nos hace más longevos con un efecto protector del café a partir de los 50 años

Científicos españoles del Centro de Investigación Biomédica en Red de Obesidad y Nutrición (CIBEROBN), en un estudio, publicado en el American Journal of Clinical Nutrition de diciembre 2018, han encontrado una mayor longevidad asociada al consumo de café.

Los investigadores han estudiado durante una década a 20.000 personas. Según los datos del estudio este efecto protector es aún más marcado en personas mayores de 55 años, que es justamente cuando aumenta el riesgo de muchas enfermedades como el cáncer (la edad es un factor de riesgo en la mayoría de patologías).

Pero un aspecto novedoso de la investigación es que los beneficios se mantenían incluso con consumos de 4-6 tazas de café al día. Según los autores, no hay riesgo de que el estudio se vea afectados por el problema de los enfermos ex-consumidores, es decir, aquellos que dejarían el café por tener ya una enfermedad previa.

Para los expertos, los beneficios tampoco podrían explicarse por un solo componente, ya que el café es una mezcla compleja de sustancias y entre ellas muchas tienen propiedades antioxidantes y antiinflamatorias y parece lógico pensar que actúen en sinergia.


El consumo diario de cafeína podría afectar la estructura cerebral



Según investigadores de la Universidad de Basilea y el Hospital Psiquiátrico en un estudio, publicado en la revista científica Cerebral Cortex de febrero 2021, la ingesta diaria de café, bebidas energéticas o de cola podrían generar una alteración en la estructura cerebral.

Hasta ahora se sabe que la cafeína, que es la sustancia psicoactiva más consumida en el planeta, hace que las personas se mantengan en alerta y que produzca también un impacto en el sueño si se consume de noche, lo que podría afectar el volumen de la materia gris del cerebro. Por este motivo, el equipo de investigación decidió realizar un estudio sobre este tema.

En el estudio participaron 20 individuos jóvenes y sanos, todos ellos consumidores habituales de café, a quienes se les suministró pastillas – con placebos entre ellas – durante dos periodos de 10 días y se les pidió que no consumieran ninguna otra fuente de cafeína durante ese tiempo. Tras concluir los análisis, los investigadores examinaron el volumen de la materia gris de los sujetos mediante escáneres cerebrales.

Los resultados fueron inesperados: la cafeína no afectó el sueño de las personas analizadas, aunque sí se pudo observar cambios relevantes en el volumen de la sustancia gris cerebral. Luego de haber consumido el placebo – es decir, de "abstinencia de cafeína" – durante 10 días, el volumen de materia gris era mayor que en el periodo en el que se suministraron las cápsulas de cafeína.

Los investigadores subrayaron que sus resultados no significan necesariamente que el consumo de cafeína tenga un impacto negativo en el cerebro. Pero el consumo diario de cafeína afecta evidentemente a nuestro hardware cognitivo, lo que en sí mismo debería dar lugar a más estudios.

Aunque el estudio logró demostrar que la cafeína reduce el volumen de la materia gris en el cerebro, tras sólo 10 días de abstinencia de café, la sustancia gris se había regenerado significativamente en los sujetos analizados.

Concluyeron que los cambios en la morfología del cerebro parecen ser temporales, pero hasta ahora no se han realizado comparaciones sistemáticas entre los bebedores de café y los que habitualmente consumen poca o ninguna cafeína.


El consumo excesivo de café reduce el volumen cerebral y aumenta el riesgo de demencia

Investigadores de la Universidad de Australia del Sur en el estudio más grande de su tipo realizado sobre este tema, publicado en la revista Nutritional Neuroscience de junio 2021, encontraron que el consumo excesivo de café, más allá de seis tazas por día, está asociado con volúmenes cerebrales totales más pequeños y un mayor riesgo de demencia.

El estudio evaluó los efectos del café en el cerebro de 17.702 participantes del British Biobank (de 37 a 73 años) y destaca que las personas que bebían más de seis tazas de café al día tenían un riesgo 53% mayor de demencia en comparación con las personas que bebían 1 o 2 tazas/día. Esta investigación proporciona información importante en términos de salud pública.

Al hablar sobre el volumen del cerebro, los investigadores observaron todos sus componentes: materia gris, materia blanca y volumen del hipocampo. Teniendo en cuenta todas las permutaciones posibles, los científicos han encontrado consistentemente que un mayor consumo de café se asoció con un volumen cerebral reducido.

Esta es la investigación más profunda sobre los vínculos entre el café, las medidas de volumen cerebral, el riesgo de demencia y el riesgo de accidente cerebrovascular. También es el estudio más grande que considera datos volumétricos de imágenes cerebrales y una amplia gama de factores de confusión.

El equipo científico precisa que si la noticia puede ser amarga para los grandes amantes del café, se trata de encontrar un equilibrio entre lo que se bebe y lo que es bueno para la salud. Esta investigación proporciona información vital sobre el consumo excesivo de café y la salud del cerebro, pero como ocurre con muchas cosas en la vida, la moderación es clave. Junto con otra evidencia genética y un ensayo controlado, estos datos sugieren fuertemente que un alto consumo de café puede ser perjudicial para la salud del cerebro. Aunque no se conocen los mecanismos exactos, una cosa simple que podemos hacer es recordar beber un poco de agua junto a esa taza de café.


El consumo de café ayuda a desacelerar el deterioro cognitivo en hombres europeos

Boukje van Gelder, experta en medicina de la universidad de Harvard y sus colegas emprendieron un estudio, publicado en European Journal of Clinical Nutrition de agosto 2006, con el objetivo de investigar si el consumo de café estaba asociado con el deterioro cognitivo de 10 años en hombres de edad avanzada, ya que los resultados de estudios previos obtenidos hasta ese momento habían sido controvertidos y faltaba información prospectiva sobre esta asociación.

La investigadora publicó en la National Library of Medicine de febrero 2017, el estudio de 10 años de duración – sobre 676 adultos, quienes consumieron en ese lapso diferentes cantidades de café – en el que comprobó que el café ayudaba a desacelerar el deterioro cognitivo. Los mejores resultados se obtuvieron en los sujetos que bebían tres tazas de café al día, mientras que los que tomaban más o menos mostraban resultados más leves.

Así, se estableció que la cafeína aumenta la serotonina y la acetilcolina, dos sustancias encargadas de estimular el cerebro y ayudar a estabilizar la barrera hemato-encefálica, una red de vasos sanguíneos y tejido que evita que las sustancias dañinas penetren al cerebro.

Por tanto, los micro-nutrientes del café pueden prevenir el daño de los tejidos por los radicales libres, un tipo de molécula que puede aumentar el riesgo de padecer cáncer. Del mismo modo, su consumo previene el bloqueo de los vasos sanguíneos del cerebro.

Incluso, el café contiene altas concentraciones de trigonelina, un derivado de la vitamina B6 con efectos antioxidantes, encargados de proteger también los vasos sanguíneos del cerebro.

De hecho, el análisis puso de manifiesto que aquellos sujetos que consumían tres tazas de café al día veían un impacto drásticamente mayor que los que tomaban más o menos.

Se cree que el consumo frecuente de café previene diversas enfermedades hepáticas. Sin embargo, un estudio reciente de la Escuela de Medicina de Harvard, reveló que esta bebida sería una buena aliada para la memoria.


El café ayuda a mejorar la memoria y el cerebro


El café ayuda a reducir 
el deterioro cognitivo


Un estudio que divulgó la Harvard Medical School en febrero 2022, reveló que el café sería un buen aliado para la memoria además de prevenir diversas enfermedades hepáticas.

De acuerdo con el artículo de la Dra. Uma Naidoo, psiquiatra nutricional de la Escuela de Medicina de la Universidad de Harvard y autora del libro “This Is Your Brain on Food” publicado en 2020, tras estudiar la relación entre el café y la salud psicológica, llegó a la conclusión de que el café ayuda a reducir el deterioro cognitivo y lo explicó en su columna de Make It.

Su análisis indica que esta bebida tiene tres puntos a tener en cuenta en relación con el cerebro y sus funciones:

* La cafeína aumenta la serotonina y la acetilcolina, lo que estimula al cerebro y estabiliza la barrera hematoencefálica (que impide la entrada de bacterias).

* Los micro-nutrientes del café ayudan a prevenir daños de los tejidos por los radicales libres a los que nos exponemos todos los días.

* Los granos de café contienen trigonelina, que activa los antioxidantes que protegen los vasos sanguíneos del cerebro.

La experta asegura que el café tiene efectos positivos cuando se toma en moderación. Por ejemplo, es bueno para el corazón y existe una forma de tomarlo para hacerlo más útil en la protección del cerebro y el mejoramiento de las capacidades de la memoria.

Una de las recomendaciones es preparar el café en casa, pues esto evita el consumo de ingredientes procesados, que a la larga podrían dañar algunos órganos del cuerpo. Tomarlo en la mañana y con poca azúcar. Usar ingredientes naturales como cacao, canela o leche de coco siempre es una buena opción a la hora de hacer un café casero sin poner en peligro la salud.

Se recomienda de dos a tres tazas por día, o menos de 400 miligramos de cafeína. Beber granos de café recién molidos y tostados oscuros también puede disminuir los químicos no deseados en la bebida, para que el café tenga efectos positivos en el cerebro.

Inteligencia corporal


La inteligencia corporal es la capacidad de utilizar el propio cuerpo con coordinación en base a otros estímulos no mecánicos. Es conocida como la inteligencia de los bailarines. Establece una gran conexión entre la mente – y las emociones – y el movimiento. Los deportistas que trabajan con objetos, por ejemplo, también la desarrollan.

Esto entra en juego a la hora de decidir cuánto café se puede tomar. La experta señala que no todas las personas reaccionan de la misma manera ante la cafeína, por lo cual se debe estar atento a la forma en la que el cuerpo se sienta cuando toma café. Si la persona no se siente bien, entonces probablemente no es bueno para su cuerpo.


El café aumenta la esperanza de vida

Investigadores del Department of Cardiology Alfred Hospital, Melbourne ratifica en un nuevo macro-estudio, publicado en el Reino Unido, en el European Journal of Preventive Cardiology de septiembre 2022, que el café ayuda a vivir más años. Un beneficio que se nota sobre todo en el café molido, pero que también se consigue con el descafeinado y el café instantáneo.

El equipo ha analizado la evolución de casi medio millón de personas a lo largo de doce años. Ninguno de los participantes en el estudio tenía enfermedades crónicas previas que aumentaran su riesgo. Se comparó cuántas de estas personas, con una edad entre los 40 y 69 años, tomaban café y cuáles no, y cuántas habían muerto durante los años del estudio. Y la novedad es que se analizó no solo el consumo de café en grano molido, sino también el descafeinado y el café instantáneo.

El principal hallazgo del estudio es que beber dos o tres tazas de café al día se relaciona con una mayor esperanza de vida, ya que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares:

* El mayor beneficio se observó en los que consumían café molido, con un 27% menos de riesgo de muerte por ictus o infarto.

* Los que consumían café descafeinado tenían un 14% menos de riesgo de morir por estas causas.

* Los que tomaban café instantáneo granulado baja la protección y tienen un 11% menos de riesgo.

* Dos o tres tazas de café bajan el riesgo de ictus, infarto y arritmias. El café en grano y el instantáneo también aportan protección ante el riesgo de tener problemas de arritmias. No así el café descafeinado.

En las personas que toman más de dos o tres tazas, se observan beneficios. En las que toman más de tres tazas las ventajas no quedan tan claras, excepto para las arritmias: los que toman café instantáneo han de tomar cuatro tazas para que se observe esa mejor protección.

Se acumulan las evidencias de que el consumo moderado de café es bueno para la salud. No solo no daña nuestro sistema cardiovascular, sino que lo refuerza y aumenta la esperanza de vida de quien lo consume.

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Ingredientes saludables del café




Polifenoles

Se trata de sustancias que "fabrican" las plantas para protegerse. Se hallan en muchas frutas y verduras, pero en el caso del café están altamente concentrados porque el grano de café es el grano de una planta. De hecho, en países donde no se consume tanta fruta y verdura, la diferencia en la ingesta de polifenoles la marca el consumo de café, quien no lo toma tiene carencia.

* Ayudan a la metabolización de la glucosa y alejan la diabetes. Además contribuyen a tener unos buenos niveles de colesterol. Y todo ello es bueno para tel corazón.

* Son antioxidantes. Protegen las células de la acción de los radicales libres y, por tanto, ayudan a prevenir la formación de tumores.

Cafeína

Además de su efecto estimulante, se ha demostrado que:

* Tiene una acción antiinflamatoria. Eso le confiere un efecto protector para la salud porque muchas enfermedades van acompañadas de inflamación. Por ejemplo, las células cancerígenas necesitan un ambiente de inflamación para desarrollarse.

* Mejora la función del endotelio. El endotelio es una capa de células que protege el interior de los vasos sanguíneos, por tanto si su estado es óptimo mejora la vasodilatación y previene la hipertensión.

Trigonelina

Es antioxidante y ayuda a metabolizar correctamente la glucosa. No hay que olvidar que una glucosa alta no controlada es un factor de riesgo cardiovascular que aumenta el riesgo de infarto.

Melanoidinas

También son antioxidantes y antiinflamatorias. Ambas acciones actúan como un escudo protector que mantiene joven el organismo porque lo protegen del daño externo y ralentizan también el envejecimiento a nivel interno.


Beneficios que aporta el consumo de café

Ayuda a reducir los radicales libres y por ende, ciertos tipos de cánceres

Al ser una de las principales fuentes de antioxidantes, el café fortalece notablemente el sistema inmunitario, por lo que ayuda al organismo a reducir los radicales libres, los cuales al superar los antioxidantes dañan las células y por consiguiente, surgen enfermedades crónicas como el cáncer.

Un consumo moderado de café ayuda al organismo a reducir algunos tipos de cánceres como el de hígado o el colo-rectal. Al ser rico en antioxidantes, el café también reduce los efectos del envejecimiento.

Ayuda a reducir peso

La cafeína es por naturaleza un acelerador del metabolismo dado que provoca un aumento de adrenalina en el cuerpo. Esto ayuda a acelerar el proceso de digestión y liberar los ácidos grasos que se encuentren acumulados en diferentes tejidos del cuerpo.

Estimula la actividad cerebral

Al estimular la segregación de adrenalina en el cuerpo, el café también actúa en varias funciones cognitivas como lo es la aceleración de los procesos cerebrales y en la memoria. Por ello, al tomar café nos sentimos mucho más estimulados y activos, por lo que rendimos más en las actividades que realicemos.

El consumo moderado de café diario (1 a 3 tazas) ayuda a reducir los índices de problemas cognitivos y ciertas afecciones cerebrales como el Alzheimer y el Parkinson. Sin embargo, las personas que consumen más de 5 tazas de café al día tienen altas posibilidades de sufrir demencia y encogimiento del cerebro.

Reduce las posibilidades de padecer diabetes tipo 2

El consumo regular de café sin azúcar protege contra la diabetes tipo 2, gracias al aumento que provoca en la hormona adiponectina y otros factores que afectan los niveles de insulina y azúcar en sangre. Los polifenoles y minerales como el magnesio en el café pueden mejorar la efectividad del metabolismo de la insulina y la glucosa en el cuerpo.

El café es una bebida que tiene altos niveles de fito-químicos, los cuales actúan como antiinflamatorios y amplificadores de la insulina. Sin embargo, para percibirlos se debe consumir el café de manera filtrada.

Ayuda a la protección del corazón

Además de estimular la actividad cerebral, el café también induce a una mayor actividad en el sistema circulatorio sin llegar a incrementar la presión sanguínea. Esto reduce la posibilidad de padecer insuficiencia cardíaca, así como otras enfermedades cardiovasculares.

Siempre se ha dicho que el café no es bueno para la presión arterial, pero aunque a corto plazo su consumo sí sube ligeramente la tensión porque produce una vasoconstricción, con el tiempo el organismo desarrolla tolerancia, por lo que no le acaba afectando.

Ayuda a combatir los dolores de cabeza esporádicos

Cuando las personas están constantemente bajo estrés tienden a padecer episodios esporádicos de dolores de cabeza. Gracias a las propiedades vaso-dilatadoras del café, se reduce el riesgo de padecer este tipo de afecciones en la salud. No obstante, si se toma más de 4 tazas de café al día podría desencadenarse el efecto contrario y sufrir de migrañas más a menudo.

Relacionado con una vida más larga

El consumo moderado de café (de tres a cuatro tazas por día) se ha relacionado con una vida más larga. Su consumo se asocia con una reducción del 8% al 15% en el riesgo de muerte. Se relaciona con una mayor esperanza de vida, ya que reduce el riesgo de enfermedades cardiovasculares.

Es ideal para activar la atención

Tomar café es muy bueno para activar la atención y nuestras memorias, en especial la de corto plazo. Pues es capaz de mejorar nuestros procesos cognoscitivos básicos como la atención, y la memoria. Claro recordando que no debemos excedernos.

Nos permite enfocarnos y retener con mayor capacidad a la hora de mantenernos alertas, y fijar algún tipo de conocimiento o desempeño de una tarea. Esto sucederá durante el lapso que dure la cafeína en nuestro cuerpo.

Ayuda a reducir los estados depresivos

Dado los altos niveles de fito-químicos y efectos antiinflamatorios, el café puede reducir en un tercio los riesgos de padecer estados depresivos. Según los resultados de varias investigaciones, las propiedades antiinflamatorias del café previenen la inflamación en el cuerpo.

Puede tener beneficios neurológicos en algunas personas y actuar como antidepresivo. La cafeína puede afectar estados mentales, como aumentar el estado de alerta y la atención, reducir la ansiedad y mejorar el estado de ánimo.

Contribuye a la realización de ejercicios físicos

Tomar café media hora antes de realizar ejercicios ayudará en la circulación, resistencia, aguante al dolor y quema de grasa durante la actividad física. Esto se debe principalmente al efecto de la cafeína sobre el sistema nervioso y la irrigación de adrenalina.

Favorece las relaciones sociales

Sencillamente, tomar café resulta ser placentero y nos pone de buen humor. Esto indudablemente favorece las relaciones sociales, ya que fomentan las charlas grupales. Por ello, también resulta ser una excelente bebida en el trabajo o cuando visitamos familiares y amigos.


Recomendaciones

Para tomar café, es hacerlo con el estómago lleno, pues evitará cualquier síntoma de gastritis o taquicardias por exceso de cafeína. Además, tomar café sin haber comido algo puede quitar el apetito y hará pasar largos períodos de tiempo sin comer.

Para tomar un buen café saludable se necesita la canela, es ideal agregar esta especia para ayudar a regular los niveles de colesterol, triglicéridos y glucosa en la sangre, para eliminar cualquier tipo de enfermedad del corazón.

Evitar añadir leche, crema o demasiada azúcar al café, porque pueden ser dañinos para el organismo por el alto aporte calórico. Algo que debemos tener en cuenta es al momento de mezclar en café con agua, leche o mucha azúcar, es que éste pierde gran parte de sus beneficios y potencialidad.

Escoger granos que sean tostados y oscuros. Estos producen más cantidad de antioxidantes en comparación con el tostado regular. Son un poco más fuertes que los tradicionales, pero se usará menos cantidad.

El café descafeinado

Aunque la cafeína es "protectora", el café descafeinado también "alarga" la vida porque sí contiene intactos el resto de sustancias beneficiosas como los polifenoles.





Los expertos aconsejan un descanso moderado y dormir bien, para no tener que depender del exceso de cafeína 
para estar alerta durante la jornada laboral, o en cualquier otra actividad que se necesite de mucha atención. 
La clave eficaz para que el café sea saludable para nuestro organismo es tomarlo con moderación. 
De esa manera se favorece la salud del hígado y se obtiene energía para mejorar nuestro estado de ánimo.




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